Hora: Entradas anticipadas: - Entradas taquilla: 12€ con copa hasta la 1.30hs, después 14€ con copa Planta: Espacio Club Tipo: Clubbing
Deconstructed club es acaso el término más manido de cuantos aluden a una tendencia musical postmoderna esencialmente definida por cuatro características principales: el solapamiento, difuminado o trituración, vía hibridación, abstracción y experimentación, de los límites de esos campos cerrados, aunque no clausurados, llamados géneros musicales, como el industrial, Jersey club, Baltimore club, ballroom, trap, techno, IDM, pop, R&B, ambient, footwork, metal, diversas manifestaciones del hardcore continuum o cualquier referencia seleccionada discrecionalmente; la respuesta activa a los efectos de la crisis económica y los contextos político-sociales concretos; la normalización del archivismo y las redes globales propias de internet; el prácticamente ubicuo uso de la producción digital, la implementación de formas como el bootleg, el mash-up o el remix y la investigación de los recursos técnicos del CDJ. Tras una primera década del siglo XXI marcada por una atonía generalizada en la construcción de nuevos paradigmas, las diferentes ecualizaciones de estos cuatro planos por parte de sus epígonos han erguido estéticas distópicas y utópicas que tratan temas como el capitalismo, el feminismo, la teoría queer, el colonialismo, el futurismo o la tecnología, han dado voz a comunidades marginadas, y han reforzado la dialéctica entre el mainstream y el underground.
En el caso de Air Max ’97 Music, su producción, catalogada por él mismo como “nightmare dance music” o “oblique club trax”, toma como referencia el grime, el Jersey club, el techno, el pop y ciertas facetas de la IDM técnicamente más obsesiva, y ofrece, al igual que su obra como artista plástico, comentarios sobre la globalización, el consumismo o la dualidad entre las realidades online y offline. Frecuente colaborador en Rinse FM y propietario del sello DECISIONS, cuyo lema es “Music to move people”, sus sesiones son complejos dinámicos caracterizados por la yuxtaposición de elementos contrastantes que reflejan una marcada actitud investigadora en torno a las historias que conforman el panorama musical contemporáneo, la cual se complementa con una fascinación por explorar el territorio que separa lo familiar de lo extraño, siempre bajo el halo de un meticulosamente conceptualizado discurso estético.
Adherida al colectivo mancuniano queer boygirl y relacionada con Mutualism y NTS Radio, donde dirige un programa mensual, la obra de AYA, anteriormente conocida como LOFT, está constante y directamente influida por cuestiones de identidad de género y procesos recientes de redescubrimiento personal. El contraste entre luminosidad optimista y caos opresivo, sin olvidar un malsano sentido del humor, impregna tanto sus sesiones como sus producciones y remixes, diseminadas por Tri Angle, The Astral Plane y Wisdom Teeth, o autoeditadas. Remitiendo, sobre todo, al hardcore continuum -especialmente al jungle y al drum and bass-, pero también a divas del pop y el R&B, al techno, al ballroom, a diversas formas del rap e incluso a la música clásica, cuando el esqueleto básico o el principio generador son reconocibles, somete la pieza a permanentes variaciones, contorsiones difíciles y elipsis en diversos planos, como si fueran fases de un programa de transformación corporal; cuando el punto de partida es indeterminado, dispone amplios sistemas de citas espasmódicas, de telarañas de fragmentos que recuerdan, en sentido análogo poético, a la escritura adorniana o a la deconstrucción derridiana.